«La hija del soldado desconocido. La tumba del nadador», Juan Pardo Vidal (Sloper)

Los padres y la muerte. Cómo afrontar la pérdida y gestionar la culpa y la traición. Estos son los temas principales de los relatos La hija del soldado desconocido y La tumba del nadador de Juan Pardo Vidal (Sloper). Los protagonistas de estas dos historias intentan repensar el vínculo con la madre y el padre respectivamente, pero manteniendo cierta distancia para no derrumbarse. Pero sin conseguirlo. Porque la muerte es una apisonadora que rompe con todas las expectativas que pudiéramos haber desarrollado y cuidado, y el corazón es el músculo más indomeñable. En ambas historias el duelo es el hecho que articula y justifica la existencia de la narración, pero hay mucho más. ¡Tienen que leerlas!

Juan Pardo Vidal nos ofrece aquí una mirada al duelo desde dos perspectivas distintas. En La hija del soldado desconocido conocemos a un hombre que ha construido su vida alejándose lo más que ha podido de su infancia y de la influencia de su madre. Ha abandonado las periferias para abocarse al mercado económico y tiene una vida estable y cómoda.

El mismo día que quiebra Lehman Brothers Holdings Inc., en uno de los casos más curiosos y brutales de derrumbamiento en la historia del mundo financiero, también recibe la noticia del fallecimiento su madre. Jünger, a quien todo el mundo conoce como J., emprende entonces un viaje para identificar el cuerpo de su progenitora y arreglar la documentación.

Lo que comienza como un acto movido por el desinterés se convierte en una indagación honda al pasado. Jünger mirará de frente su propio pasado y, fundamentalmente, intentará explicarse la traición. Algo pondrá patas para arriba su propia forma de entender los hechos.

Jünger necesita mantener intacta su visión, para poder continuar con su vida. Si se esfuma la verdad, si aquella supuesta traición de su madre hacia él que lo sostuvo alejado durante todo ese tiempo resulta que era infundada, ¿qué va a ser de él? La verdad es una cosa inasible que es más bien tornasolada, ni blanca ni negra. La forma en la que el autor trabaja el tema de la memoria vinculada a la traición me ha parecido fabulosa.

Aunque a simple vista el gran tema de la novela sea el duelo, de fondo, y creo que con intención de que su radio de expansión supere a la muerte, está la traición. ¿De qué está hecha nuestra memoria? ¿Recordamos con precisión? ¿Qué podemos hacer cuando una verdad aflora y pone en duda la verdad en la que hemos creído toda nuestra vida, la verdad en la que nos hemos afirmado para continuar en pie, para sostener esa distancia? Todas estas son inquietudes que atormentan al personaje y que se aparecerán a lo largo de todo el relato para llevarnos a mirarnos mejor.

Entre las cosas más interesantes de esta historia hay que destacar la interrupción de hechos y personajes que provocarán un cambio en las expectativas del personaje. Y, si a esto le sumamos que todo lo que sucede tiene un sentido y sirve para otorgar movimiento al relato, podríamos concluir que es una historia que a nadie dejará indiferente.

Pensar la pérdida y la relación con la herencia pero sin el tinte de la melancolía. Ésta parece la propuesta de Juan Pardo Vidal en La tumba del nadador, una lectura interesantísima cuyo principal acierto es la forma en la que el autor va al encuentro con la memoria: en un tiempo futuro. Tendemos a vivir sometidos a una relación estricta entre el momento en el que suceden las cosas y el tiempo en que deben ser narradas, pero el autor aquí rompe este molde narrando en futuro y adelantándose así al momento en el que suceden los hechos. Este recurso le permitirá también introducir interesantes reflexiones en torno al oficio de la escritura y a la cualidad de soberanía de un escritor sobre su obra.

Esta segunda narración nos ofrece una exploración de cómo funcionan los engranajes de un relato y desvela algunos aspectos del trabajo de escritura. Aquí el narrador es un escritor que se encuentra en una fiesta. El ruido exterior se plasma a través de una voz interior que está completamente acelerada, mientras va intentando hilas los acontecimientos. La memoria y sus hilos concomitantes, la posibilidad de asociar elementos y situaciones aparentemente inconexos es otro de los temas bien trabajados aquí. ¿Por qué en medio de esa fiesta, el narrador piensa en su padre muerto? A partir de ahí se irá desarrollando un relato inquietante y, al mismo tiempo, hipnótico.

Es una novela que pretende trabajar el tema de la memoria pero desde un lugar poco melancólico más bien realista y eso es muy importante, porque con el recurso de lo metaliterario consigue un tono irónico, que vuelve sumamente entretenida la lectura. Es un tipo de novela que me interesa mucho y que, creo, tiene elementos que podrían servirnos a los que amamos la escritura para pensar mejor nuestra relación con los textos.

Insisto en que uno de los elementos asombrosos de esta historia es la narración en futuro, porque con él Pardo Vidal consigue mantenernos atentos, deseando saber más, mientras se van organizando frente a nosotros los elementos del relato. Y sin embargo, el interés de la narración está en el presente. Y, dadas las características del texto, esto resulta asombroso. Así como en La hija del soldado desconocido en La tumba del narrador el relato se mueve constantemente hacia delante y el presente ocupa toda la escena. En este segundo caso, porque vivimos la historia a través del personaje, un escritor que juega con sus personajes como si fueran marionetas, y se desquita con ellos de la impotencia que le provocan algunos hechos de su propia historia.

Ambas historias también se organizan en torno al verbo y encontramos pocas descripciones. El lenguaje es seco, y el interés narrativo está en demostrar que también la memoria se organiza en función al verbo, a las acciones, a los hechos; aunque en ocasiones demos por verdad un hecho que no ha tenido lugar. La verdad de la memoria seguramente es otro de los grandes temas de estas dos historias. ¿En qué creemos cuando confiamos en lo que recordamos? Me parece que encontramos muchísimos hilos de los que tirar para pensarnos en relación a la memoria.

Juan Pardo Vidal nos ofrece aquí dos novelas cortas o dos relatos largos que tienen en común la pérdida, pero que trabajan con el duelo de maneras muy diferentes. Una lectura fabulosa de la que es difícil volver sin pensarse un poquito más. Que nadie las deje escapar.

LA HIJA DEL SOLDADO DESCONOCIDO
LA TUMBA DEL NADADOR
JUAN PARDO VIDAL
SLOPER
2023