Presentación en Málaga de «Si cerca hubiese un mar» (Las Lolas)

El viernes 1 de diciembre tuvo lugar en el Centro Cultural María Victoria Atencia de Málaga la presentación de la antología Si cerca hubiese un mar, editada por Sonia Aldama y la Asociación de Mujeres Escritoras e Ilustradoras (AMEIS) y publicada en la editorial Las Lolas. Dicha obra reúne poemas, microrrelatos e ilustraciones de autoras contemporáneas que rinden con ellos homenaje a la poeta Ida Vitale, en el centenario de su nacimiento. Además de encontrarnos en ella escritoras e ilustradoras de corta visibilidad, también han colaborado maestras como María Victoria Atencia, Angelina Muñiz-Huberman y Olvido García Valdés. El acto de presentación en Málaga nos ha permitido rendir un doble homenaje a dos de nuestras maestras: Ida Vitale y María Victoria Atencia. La poeta malagueña tuvo la generosidad de acercarse y compartir con nosotras esta tarde inolvidable.

María Victoria Atencia llega a la sala del Centro Cultural que lleva su nombre, en Ollerías 34, del brazo de José Antonio Mesa Toré. «Gracias por venir», le decimos. Las palabras se nos secan ante una poeta que tanto significa para nosotras. «Gracias», sin embargo, es una palabra llena de muchas otras. Estamos aquí para celebrar la obra de Ida Vitale, que este año cumplió 100 años. Cien años de dedicación total a la palabra. Cien años en los que empujó las cuerdas del sistema para pararse y obtener reconocimiento en un mundo de hombres. Un camino similar al que ha recorrido María Victoria Atencia. Y tienen muchas cosas en común. Ambas nacidas en noviembre, de un lado y otro del Atlántico: Ida en Montevideo, en 1923; María Victoria en Málaga, en 1931; ambas han trabajado en obras personalísimas y universales, que han marcado un punto de inflexión en la literatura de su tiempo. En el caso de la poeta malagueña, su vasta obra reúne libros asombrosos como Marta y María, Los sueños, El umbral y De la llama en que arde. Leerla es adentrarse en una poética donde la exploración del lenguaje y la búsqueda de la espiritualidad han sido ejercicios constantes. En esta antología puede leerse su maravilloso Epitafio para una muchacha, que es un buen ejemplo de esta indagación honda de la experiencia vital y literaria.

Abre el acto José Antonio Mesa Toré, director del Centro Cultural Generación del 27, quien acoge esta presentación con calidez. Es oportuno, dice, rendir este homenaje en esta sala que lleva su nombre, por todo lo que significa María Victoria para la cultura de nuestra ciudad. Se refiere después al viaje que realizó Ida Vitale a España hace más de una década, recordando aquellos días con cariño y señalando el impacto que la poeta uruguaya causó a todos, por su generosidad, su elocuencia y su carácter divertido y lúcido.

A continuación toma la palabra Sonia Aldama Muñoz, responsable principal de esta antología, quien supo sacarla adelante en situaciones complejísimas y nos reunió esta tarde; dice que le encanta poder presentar esta obra en Málaga y que se siente honrada por la presencia de María Victoria. Agradece al Centro Cultural, siempre atento a las necesidades de los colectivos pequeños para ofrecer espacios de difusión y reconocimiento. Aldama señala lo importante que sigue siendo trabajar por la visibilidad del trabajo de las escritoras y confirma que es el compromiso fundamental de AMEIS. Y lee el comienzo del prólogo: «En algún lugar del planeta una niña escribe un poema, esa niña tiene los ojos verdes, negros, la piel marrón, canela, la niña se ha manchado las manos de tiza, habla en español, árabe, chino, portugués. Ella sostiene el equilibrio del mundo con sus versos, indaga en el lenguaje y se sobrecoge con el movimiento preciso de cada sílaba. En algún lugar del mundo hay una niña que merece leer a poetas y narradoras que aparezcan en los libros. Esa niña que fuiste tú va a una escuela donde conocen a Shakespeare y a Cervantes, ella también merece leer a Rosa Regás, Desirée Bela-Lobedde, María Victoria Atencia o Ida Vitale (...)».

El acto desprendió emoción y agradecimiento. Las siguientes intervenciones fueron de Mercedes Ruiz —quien repasó los inicios de AMEIS y las razones por las que ella se unió y se sintió parte de esta institución—, Pilar Flórez Nuñez —que habló sobre la importancia de construir espacios para la visibilidad de las mujeres, recordando el camino que poetas como Ida y María Victoria han recorrido, allanando nuestros propios pasos— y de las escritoras Mar Artero y Yolanda Rueda, que leyeron sus respectivos relatos de esta antología. Por mi parte, mi intervención planteó los puntos en común entre las obras de María Victoria Atencia e Ida Vitale. Ha sido una alegría infinita poder decirle «Gracias» a María Victoria, en una sala que reunió a amantes de la palabra, poetas y gente que valora el camino trazado por una de las poetas más interesantes de la literatura de Málaga. El acto fue musicalizado por el guitarrista Tato de Lara.

Si cerca hubiese un mar es una antología de poemas, microrrelatos e ilustraciones de más de ciento diez mujeres, todas reunidas en torno a la obra de Ida Vitale. Si sientes curiosidad, no dudes en hacerte con este libro, publicado por la editorial Las Lolas, para descubrir una gran variedad de textos en torno a la infancia y la resistencia.