Biografía de Clarice Lispector

En la literatura brasileña hay dos escritores que consiguieron ganarse un sitio único: Guimarães Rosa y Clarice Lispector. Mucho de lo que sabemos de la literatura de la segunda mitad de siglo en Brasil se lo debemos a ellos.

Chaya Pinkhasovna Lispector nació el 10 de diciembre de 1920, en Chetchelnik (Ucrania) en el seno de una familia de origen judío que fue perseguida y sufrió las amenazas de uno de los regímenes más brutales de la historia.

Antes de su nacimiento, su madre fue violada por soldados de las tropas del régimen que la contagiaron de sífilis. Se quedó embarazada de Chaya siguiendo el consejo popular de que un embarazo podría curarla. Así nació la estrella, con la responsabilidad de salvar a su madre, que falleció de sifilis cuando la niña tenía 10 años.

Cuando Chaya era pequeña la familia se exilió en Brasil. Allí, todos cambiaron sus nombres para pasar desapercibidos entre los nativos, y Chaya se convirtió en Clarice. Todas estas experiencias y el poso de tristeza y de culpa que provocaron en ella, la condicionaron irremediablemente a la escritura.

Desde pequeña sintió una gran atracción por la literatura. Comenzó a garabatear cuadernos y fue desarrollando una relación estrecha con la palabra escrita. Su cualidad de criatura indómita la llevaron a destacar en todos sus círculos; no sólo por su escritura, también por sus ideas y su forma de llevarlas a cabo.

Trabajó como periodista, redactando artículos de diversos estilos y así fue haciéndose conocida hasta alcanzar un cierto renombre. En eso la ayudó el ser creadora de un estilo único, donde pasión y cuerpo ocupan un lugar fundamental.

Clarice Lispector falleció de cáncer el 9 de diciembre de 1977 en Río de Janeiro. Tenía 56 años. En su lápida, ubicada en el cementerio de Cayú, puede leerse su nombre hebreo: Chaya Bat Pinkhas.

La obra de Clarice Lispector es reconocible desde lejos. Su capacidad para trabajar con tramas aparentemente sencillas pero trabajarlas desde un estilo único la han convertido en una de las escritoras más interesantes e inconfundibles del siglo XX.

Lo primero que resalta cuando leemos a Clarice Lispector es su forma de hacer con un lenguaje aparentemente sencillo una indagación de la forma y la experiencia vital, dotando a sus narraciones de una sensualidad poética absolutamente auténtica e impactante.

Algunas de sus obras más conocidas son El triunfo, El lustre, La ciudad sitiada, La hora de la estrella, La lámpara y La mujer que mató a los peces.

Alguna vez le preguntaron a quién intentaba conquistar con su pluma y por qué era tan enigmática, Lispector respondió que no escribía para agradar a alguien, y que no le importaba lo que otros pensaran de lo que salía de ella.

Quizá esa seguridad, ese empeño en lo insólito y en lo auténtico haya tenido mucho que ver en que se haya convertido en una de las autoras ineludibles de nuestro siglo. Una autora incalificable y fabulosa.